| La razón básica de esto es simple; casi estúpidamente simple. Se puede comprender la comprensión y se puede ver que esa comprensión puede aumentar. La estupidez, la ignorancia, la enfermedad, la aberración, la incapacidad, son sólo una disminución de la comprensión y son, en sí mismas, menos comprensión, y son, pues, menos comprensibles. Uno no comprende que podría empeorar, así que no tiene una gran comunicación con la gente que le dice que empeorará. El moribundo cree firmemente hasta el mismísimo momento de su último suspiro, sin importar lo que le diga a su médico o a su familia, que va a mejorar. No tienen comprensión alguna de ese estado de no comprensión llamado muerte. Se puede comprender lo comprensible. No se puede comprender lo incomprensible porque la definición de lo incomprensible es su imposibilidad de comprender. Esta es una situación casi estúpidamente simple. |
